jueves, 4 de octubre de 2007

Luz

la luz que entra por la ventana
la luz que se cuela por las retinas
la luz que camina por la superficie de las cosas
la luz que se apaga cuando cerrás las manos
la luz que se describe en tu piel tersa
la luz que mantiene despiertos estos días tibios
la luz que desaparece al doblar las sábanas
la luz que carcome la música de la noche
la luz que es la muerte del sinsentido cotidiano
la luz que emana de tus labios cansados
la luz que se muere
la luz guardada en cajas
la luz desesperada
la luz de mi desierto
la luz de las piedras insuficientes
la luz de las piedras sin boca
la luz de las repeticiones hartantes
la luz que se desprende de la ausencia
la luz que es ausencia
la luz del camino perdido
la luz del desierto saturado

la luz de tus ojos cerrados

oscuridad, ahora

10 comentarios:

Atravesdelagrieta dijo...

Dani: éstos dos tuyos son bellos, son luz a través de mi grieta. Beso. Ceci

Verónica Cento dijo...

Hola Ladani

Te agradezco el comentario en mi sur. Tu blog me pareció sumamente interesante. Me quedo a leer en silencio...

un beso

luks dijo...

poema de la luz y su ritmo de brillos y sombras

lindo, che

salut!

L ... dijo...

hoy es uno de esos días en que me siento así, a oscuras... qué bueno leerla.

salutes desde las hojas!

Teodoradorna dijo...

y en el mar entra la luz y se disfumina hasta hacer una claridad que no parece claridad.
muy hermoso.

Jardín de infinitas plantas olorosas dijo...

La luz que inquieta busca un lugar en este escrito y se refleja tibiamente en la sonrisa y el pensamiento de quien lo lee.

Me encantó.

RocanLoveR dijo...

La luz, la luz, esa que se ve, con los ojos cerrados.... luz que ilumina el alma...

Gracias siempre por tus palabras.
Saludos dani!

Marcela dijo...

Me gustó “lo luminoso” y esta idea de que el mar por la noche borra todas la huellas.
Saludos

sole (...) dijo...

puffff
me re gustó.

la luz que vela fotogramas.

besotes!

principio de incertidumbre dijo...

Bellísimo...


Me quedo sobre todo la luz cuando uno cierra las manos...

Es como un reflejo muy de niño, ¿no?

A ver qué pasa.

Hermosa lectura me dio tu blog.

:)